15 abr 2009

Carencia

¿Por qué cuando te sientes sola dices: tengo a la soledad como única compañía?

En realidad la soledad es un vacío: no se siente, no se piensa, no se mira, no se oye, no se huele, no se toca...

Lo que sí sientes, es el desamparo. Sabes que no tienes a nadie a quien recurrir, no hay quien escuche tus reclamos. Ni tampoco quien los quiera escuchar. Simplemente te has vuelto nadie.

No tienes aliento, no tienes alma. Te has convertido en el ser más pequeño, y no porque lo hayas querido precisamente, si no porque todo a tu alrededor es tan monstruoso, que aquello que atormenta tu ser, te obliga a reducir mente y cuerpo.

En tus ojos se puede descifrar la llamada de auxilio, pero es más fácil ignorarte y hacernos los ciego-sordo-mudos. Imagino que todos los que hemos rechazado tu pedido de ayuda es porque anticipamos la caída absoluta al mismo abismo que tú, solitaria. Tenemos miedo. Comprende que el miedo a la oscuridad y a las caídas (y recaídas) es bastante natural en los seres humanos simples y sencillos como nosotros.

Ah! Y una cosa más: no pienses que te ignoramos todo el tiempo. En realidad, a veces sí eres imperceptible.